¿Es importante el nombre que
tenemos? ¡Claro que sí! Es lo primero que decimos al presentarnos y casi la
primera pregunta que le hacemos a un desconocido: ¿cuál es su nombre?
Cuando sabés de alguien que
espera un hijo, le preguntás, ¿cómo le van a poner?
Entre las muchas características que distinguen a todo ser humano de los
demás, el nombre lleva la delantera.
De ahí, la
enorme responsabilidad de los padres de elegir el nombre propio,
ya que es lo que nos identificará durante toda la vida.
Una persona llamada Ángel, puede ser un delincuente y estar preso, o una
persona que le pusieron Libertad, puede estar atado a un vicio. El nombre no
coincidió con la persona.
Hay nombres dados a Dios que están en armonía con quién es él, y nunca
nos dará la sorpresa de contradecirse. ¿Por qué? Porque él es inalterable,
invariable, es el mismo AYER y HOY y POR LOS SIGLOS. Al referirnos a él
recalcamos su carácter, aquello que lo identifica: Santo, Justo, Bueno,
Protector, Misericordioso, ¿con qué nombre llamás a Dios, es decir, qué
descubriste de él que lo caracteriza y que siempre será así?
Mientras tanto, el clima sigue variando en Montevideo, días de primavera
y noches invernales, así que seguimos con algunas recetas para entrar en calor
como
REPOLLITOS DE BRUSELAS CON
POLENTA
REHOGAR CON POCO ACEITE
Carne tierna en bifes o cubos
o tiritas
Puerros en rodajas
Morrón en tiras
Zanahorias en rodajas o
ralladas gruesas o bastoncitos
AGREGAR
Pulpa de tomates
Laurel
Sal
Pimienta
Un poco de comino (opcional)
INCORPORAR Y COCINAR EN LA SALSA
Repollitos de Bruselas (si son chicos pueden ir enteros)
SERVIR CON
Polenta (o arroz, pasta,
puré)
Como verás es un plato colorido y completo: carbohidratos, proteína y vegetales.
Que te quede rico, con cariño,
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