La idea
de que el amor de Dios es condicional, o que hay que hacer algo para ganarlo o
que se puede llegar a perder es muy común y extendida.
Sin
embargo este amor es incondicional, es eterno, y superior a cualquier gran amor
humano que podamos recibir.
Si todos
los niños del mundo supieran que alguien los ama de esta forma y crecieran
sabiéndose amados de tal manera, nuestro mundo sería distinto.
¿Lo
supiste de niño? ¿Lo sabés ahora que ya no sos un niño?
Podés
haber sufrido desencantos de parte de personas que decían amarte, o viviste el
rechazo, sin embargo hay una buena noticia que ojalá la creas: Dios te ama tal
cual sos, te acepta, te valora.
El otro
día encontré este pensamiento en el face:
"No hay nada que podamos hacer para que Dios
nos ame más...
No hay nada que podamos hacer para que Dios nos ame menos...
¡¡¡Así es la Gracia de Dios!!!"
No hay nada que podamos hacer para que Dios nos ame menos...
¡¡¡Así es la Gracia de Dios!!!"
En una
palabra, ese amor te persigue cualquiera sea tu actitud hacia él...¿por qué
entonces no disfrutarlo en vez de resistirlo?
En vos
está la decisión y la respuesta.
El otro día probé una receta que hace tiempo la tenía en mi lista de
pendientes, y acá va la explicación de la misma.
ESCONES DE ROMERO,
QUESO, DÁTILES Y CIRUELAS
INGREDIENTES
EN UN BOL COLOCAR EN ESTE
ORDEN
300 gr de harina
2 cucharitas al ras de polvo de hornear
100 gr de queso parmesano rallado
60 gr de azúcar
MEZCLAR Y UNIR A LOS SECOS
80 cc de aceite o 100 gr de manteca
1 huevo
100 cc de leche
AGREGAR
100 gr de dátiles cortados en trozos pequeños (higos o ciruelas o una
mezcla de los tres, pero pesando los 100 gr)
unas hojitas de romero (poco porque puede ser invasivo)
Trabajar como una masa de escones, sin amasar y sólo uniendo bien los
ingredientes.
Estirar la masa de un cm de alto y cortar a gusto (redondos,
triángulos, cuadrados, formas, etc)
Si se desea pintar con leche antes de poner en el horno a 200°, unos
12 minutos aproximadamente.
Quedan muy ricos untados con un sabroso queso crema.
Para el desayuno, la merienda o un té con amigas, es una recomendable opción.
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