sábado, 11 de marzo de 2017

Dedos de Hamán no sólo en Purim

¿Escuchaste alguna vez acerca de la fiesta de Purim?
Es poco conocida y no se difunde por los medios, por lo menos en Uruguay. Quienes tienen conocidos judíos saben que Purim es una de las festividades más gozosas de la tradición judía, una fiesta cuyos preceptos religiosos incluyen ser feliz. 
Los días anteriores a Purim y, en particular, el propio día de Purim, en Israel las calles están repletas de niños disfrazados, en los comercios se venden accesorios de colores chillones para la celebración y hay fiestas de disfraces para adultos también.
El origen de esta festividad está en el Libro de Esther, en la Biblia. Relata cómo los judíos del reino de Persia se salvaron de ser aniquilados por Haman, el primer ministro del Rey Asuero.
La fecha en que se celebra Purim es el 14 del mes judío de Adar, que suele coincidir en marzo.
Uno de los aspectos excepcionales del Libro de Esther es que la historia trata sobre el heroísmo de una mujer, Esther, que era judía y llegó a ser la esposa del Rey Asuero. 
Fue ella quien salvó a los judíos y convirtió el día de aquel horrible decreto en una festividad histórica.

Se observan algunas costumbres en esta festividad y te cuento lo que encontré en Google.

·         El Ayuno de Esther
·      Lectura del Libro de Esther la noche de Purim y la mañana de la festividad, se lee en voz alta el Libro de Esther en la sinagoga. 
·    Cena Festiva después del ayuno, con juegos y otras diversiones que duran hasta bien entrada la noche. 
·     Regalos de Alimentos Especiales en canastas que envían a sus amigos y vecinos, y también dan dinero a los pobres.
·         Disfraces que gustan especialmente a los más pequeños
·    Hacer y comer "Orejas de Haman", unos pastelitos tradicionales de Purim, que tienen forma triangular (para representar orejas) y están rellenos de semillas de amapola y mermeladas.

Algo interesante a comentar es que el libro de Esther no menciona en ningún momento el nombre de Dios y sin embargo al leerlo se percibe la manera en que Dios preparó todo para salvar a su pueblo del exterminio y que Hamán recibiera su castigo.

Buscando esta información di con la receta de las "orejas de Hamán" y algunas variantes en las diferentes comunidades judías de la diáspora.

Y también encontré otro dulce que me vino bárbaro para aprovechar unas pocas láminas de masa filo que me quedaban de otra preparación. ¿Sabés que en las comunidades judías de Grecia o de Turquía, Purim es celebrado comiendo los "dedos" del malvado Hamán? Aquí hay una receta para este rico bocado dulce.
Te iré mostrando cómo lo hice a través de las fotos. Como tenía retazos, no salieron iguales, y no es por justificarme...¡pero quedaron más reales! Date cuenta que los dedos de las manos son diferentes, más cortos, más largos, más finos, más gruesos, ¿no es verdad?


Necesitás para unos 30 aproximadamente:
Masa filo
Cortás cuadrados de unos 10 cm x 10 cm o rectángulos chicos. Los pincelás con manteca derretida o aceite.
Procesás
1  taza y media de almendras
2 cucharadas de azúcar
Agregás y mezclás 
1 cucharadita de canela molida
1 cucharada de cáscara de naranja rallada

Ponés una cucharadita o un poco más en un lado de la masa y luego empezás a armar el "dedo"
Doblás los extremos y empezás a enrollar por la base. Al terminar podés pincelar para que quede sellado el rollito.
Llevás a horno a 180° por unos 10 minutos y te fijás si está cocido, si se hace necesario dejalo un poquito más, pero cuidando que no se pase de cocción. De quedar doradito a quemarse es rápido y te aconsejo vigilar el punto.
Los espolvoreás con azúcar impalpable, esperás que enfríen y prontos para comer estos rollitos crocantes y dulces con un toque de naranja exquisito.
Deseo que te queden ricos y contame si los hacés. Con cariño,


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