miércoles, 30 de mayo de 2018

Arroz con leche, coco y vainilla


Las pequeñas cosas de la vida pueden ser las más grandes y generalmente nos llenan de felicidad.
Hay muy lindas frases sobre ellas:
"Aprende a disfrutar de las pequeñas cosas de la vida y conocerás la felicidad"
"No quiero grandes cosas en mi vida, sólo pequeñas cosas, que hagan grande mi vida"
"Todo el mundo anda tratando de lograr grandes cosas, sin darse cuenta que la vida está hecha de cosas pequeñas"
"Las pequeñas cosas son las más interesantes en descubrir"
"El éxito está en la vida que uno lleva, en cómo vive, en cómo goza, cómo se integra, cómo disfruta de las pequeñas cosas"
Muchas más, pero con estas es suficiente.
Si cada día al comenzarlo y al acabarlo dedicás breves minutos para hacer una lista de las pequeñas cosas que tenés o hacés a diario, en vez de quejarte por ellas, te darás cuenta que son grandes motivos de gratitud a Dios. Cosas pequeñas como el sueño reparador, poder sentir el frío o el calor en tu piel, que el resplandor del sol haga cerrar tus ojos, el cansancio de tus pies, las arrugas de tu rostro, ir al dentista o al peluquero...interminables motivos de agradecimiento, otros ¡no pueden disfrutar esas pequeñas cosas! ¡Claro que te diste cuenta que hay algo muy grande detrás de cada una y vos lo tenés!
Dentro de las recetas clásicas te quiero contar cómo hago el arroz con leche y puede ser un postre muy sano para ofrecer a los abuelos en su día. Mi mamá lo hacía distinto y ambas formas y las miles que deben haber por allí hacen de este postre antiguo un manjar.
Podrías contarnos cuál es tu receta!!
ARROZ CON LECHE, COCO Y VAINILLA

OLLA

1/4 taza de agua fría
cáscara de limón
ramita de canela

AL HERVIR AGREGAR Y BAJAR EL FUEGO

1/4 taza de arroz sin lavar

AL QUEDAR POCA AGUA EN EL FONDO LENTAMENTE AÑADIR

1/4 litro de leche
1 cucharada de manteca o una de crema doble
1 cucharada de coco rallado
pizca de sal

Cocinar a fuego bajo hasta que el arroz esté cocido y si hace falta agregar más leche a demanda.
Quitar la ramita de canela y la cáscara del limón y añadir a gusto 1 o 2 cucharadas de azúcar y una cucharadita de vainilla, revolviendo bien hasta que se disuelva.
Estas medidas dan para dos porciones, así que, pasar a compotera y llevar a la heladera para enfriar.
Se puede decorar a gusto con canela en polvo
la canela en rama o la cáscara del limón de la cocción.


También con pasas o almendras fileteadas... ¡como más te guste!
NOTA:
El grado de consistencia y el dulzor va a gusto. Los condimentos también.

Que con este clásico o el que logres con tu creatividad, hacé feliz a un abuelo en su día. Que te quede rico, con cariño, 








No hay comentarios:

Publicar un comentario