La llegada de un niño a la
familia, la alegra y la transforma. Padres, abuelos y tíos viven una dicha
enorme.
Lo que sigue a continuación, lo
copié y pegué de un artículo que habla acerca de lo maravilloso que es tener
niños en la familia. Lo disfruté mucho, ¿será porque en breve seré tía
abuela????
En una parte dice que, podemos
permitirnos ser el niño que llevamos dentro sin sentir vergüenza al:
·
Pintar con
los dedos.
·
Jugar con
el barro.
·
Jugar a
las escondidas.
·
Capturar
luciérnagas
·
Ver
dibujos animados los sábados por la mañana.
·
Pegar arco
iris, corazones y flores con los imanes de la heladera.
·
Poner
pasto y agua para la llegada de los Reyes Magos.
·
Disfrazarnos
Si nos divertimos montones en
esos momentos, como niños, ¿por qué nos cuesta tanto entender que para
acercarnos a Dios tenemos que ser como niños? Es decir, ser sencillos,
humildes, confiados. Ser como un niño ante Dios, nos libraría del estrés, la
angustia, la baja autoestima, el sentimiento de soledad e incomprensión, la
impotencia, y tantas otras cargas que soportamos en el alma.
Vamos a seguir en próximos
posteos, con el artículo que te dije que me encantó leer.
Y ahora, llegó el momento de
compartirte algo rico y fácil.
PIZZETA DE COLIFLOR EN SARTÉN
MASA
½ taza de puré de coliflor cocido
1 cucharada de aceite de oliva
3 cucharadas de harina de avena
½ cucharadita al ras de polvo de hornear
¼ cucharadita de sal
¼ cucharadita de orégano
¼ cucharadita de comino
Dejar descansar unos minutos.
Aceitar apenas una sartén y sobre
ella ir colocando la masa de coliflor por cucharadas, para luego unirlas.
A medida que se extiende, para que no se
pegue a las manos, humedecerlas cada vez que se necesite.
Cubrir con el relleno preferido,
colocar una tapa y llevar a la hornalla con la llama bien baja.
Cuando tenga piso y se note
cocida por arriba, ya está.
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