martes, 28 de mayo de 2019

Hamburguesas sui géneris (quinoa,calabaza,lentejas)


Cuando Uruguay juega mundiales, no importa la división, me gusta seguir la competencia.
En estos días, ha jugado con dos países y salió vencedor en cada partido.
Qué fabuloso celebrar una victoria y qué tristeza es ser el perdedor. Un jugador hondureño, luego del partido lloró desconsoladamente. Claro que perdieron, pero lo intentaron, se enfrentaron al rival, dieron lo mejor, pero no fracasaron…tuvieron fe en que iban a lograr la victoria y eso ya los posiciona como ganadores.

Pensando en esto, te copio-pego algo que encontré acerca del temor a fracasar, ¿lo leemos???

“Hoy en día, uno de los miedos que invade el corazón de mucha gente es el temor a fracasar.
 Admiro a la gente que contrae un compromiso y lo mantiene “contra viento y marea”.

Recuerde que fracasar no significa que…

…usted sea un fracasado. Significa que aún no ha tenido éxito.
…usted no haya logrado nada. Significa que ha aprendido algo.
…usted haya sido un tonto. Significa que ha tenido mucha fe en que lo lograría.
…usted haya sido avergonzado. Significa que tuvo la voluntad de intentarlo.
…usted no tenga capacidad. Significa que tiene que hacer algo en forma diferente.
…usted sea inferior. Significa que usted no es perfecto.
…usted haya malgastado su vida. Significa que tiene una razón para empezar de nuevo.
… usted deba rendirse. Significa que tiene que esmerarse más.
… usted nunca lo vaya a lograr. Significa que le llevará un poco más de tiempo.
…Dios le haya abandonado. ¡Significa que tal vez él tenga una idea mejor!

A. E. Hotcher escribió: “Por supuesto que todos tenemos límites. ¿Pero cómo vas a descubrirlos si no te decides a explorar tan lejos como te sea posible? Prefiero fracasar en intentar algo que no ha sido jamás realizado, antes que triunfar en algo conseguido ciento de veces por personas mediocres”.

La Biblia dice: “Los que confían en Dios renovarán sus fuerzas; volarán como las águilas: correrán y no se fatigarán, caminarán y no se cansarán”. (Isaías 40.31)
Entréguele su vida a Dios, confíe en él y será un ganador.”

Con esto en mente, hoy es un día especial, el día mundial de la hamburguesa (sí, ya no saben qué inventar) y por eso te dejo una receta.

HAMBURGUESA SUI GÉNERIS
(DE QUINOA, LENTEJAS, CALABAZA)


INGREDIENTES

¾ taza de calabaza cocida (yo lo hice en el micro)
¾ taza de lentejas cocidas
¾ taza de quinoa cocida (podés poner más)
1 clara de huevo
1 cucharada de perejil picado
2 cucharadas de queso rallado
2 cucharadas de sofrito de cebolla, morrón, ajo

PROCESAR

¾ taza de calabaza cocida
¾ taza de lentejas cocidas
¾ taza de quinoa cocida
1 clara de huevo

AGREGAR Y MEZCLAR CON TENEDOR
1 cucharada de perejil picado
2 cucharadas de queso rallado
2 cucharadas de sofrito de cebolla, morrón, ajo
2 cucharadas de pan rallado con condimentos

Untar una asadera con aceite o spray vegetal.
Tomar un cortante con forma redonda y llenar con la mezcla
ya que queda algo chirla. Si querés espesarla, agregás avena, o harina, pero ya te quedaría más compacta, es según los gustos.
Llevás al horno a 200*, hasta que tome un color dorado por debajo, las das vueltas y que termine de dorar.

Ya están prontas para armar tu hamburguesa!!!

  Para hacerla más saludable, en vez de mayonesa, unté el pan con ricota.

  Un secreto... no tenía pan de hamburguesa, pero sí pan de viena (de pancho), así que corté... dos juntos!!!!

 Si no te lo contaba, te dabas cuenta??????

  Mmmmm, ya me dio ganas de comerme otra.
Hacé la tuya, sustituí ingredientes si no tenés estos, y no te prives de celebrar esta fecha mundial!! Que te quede rica, con cariño, 





lunes, 27 de mayo de 2019

Canelones de sobrantes de heladera


Las madres no son perfectas como no lo somos sus hijos, pero son el tesoro más valioso que la vida nos da.
Aunque como adultos este sea el pensar y sentir respecto a ellas, parece que, en la niñez y juventud las madres son vistas de otra manera.
Por ejemplo...cuántas veces de niños, le hemos dicho enojados: “sos la mamá más mala...”
Cuando nos obligaban a dormir a una hora razonable, nos asignaban tareas en la casa, o nos prohibían ver ciertos programas de TV.

Con todo, nos gustaba tanto que esa mamá, la más mala, nos abrazara, jugara, nos elogiara, nos llevara a pasear…

En la actualidad, muchos niños siguen pensando que su mamá es “la más mala”. Si te encontrás en esa categoría de madres, te animo a que continúes “siendo mala”.
Sabés por qué? Porque si corregís, ponés límites claros, enseñás valores como el respeto, lo hacés por amor y verás resultados positivos en la vida de tus hijos.
Por ser “mala”, estás formando personas responsables, disciplinadas, seguras de sí mismas, que tomarán buenas decisiones, serán agradecidas, generosas, y muchísimo más.

Qué les dice la Biblia a las mamás más malas...
"Muchas mujeres han hecho el bien, pero tú las sobrepasas a todas"
Y las mamás más malas, pueden aprovechar restos de la heladera y transformarlos en exquisitos platos como estos canelones.
CANELONES DE “SOBRANTES DE HELADERA”

MASA

2 tazas de harina
½ cucharadita de sal
1 cucharadita de polvo de hornear
1 huevo batido
1 taza de leche
1 taza de agua (podés agregar más si la masa se pone muy densa)
Debe quedar, con una consistencia que permita deslizarse por la panquequera, o sartén si no tenés.

SALSA BLANCA
Cuando la bajás del fuego, cubrila con rolo o separador de alimentos sobre la misma salsa, para que no se forme costra
50 g de manteca
4 cucharadas de harina
½ litro de leche
1 cucharadita de sal
Nuez moscada

RELLENO: lo que tengas
En mi caso, tenía ya cocidos zapallitos y carne picada. Rehogué cebolla, morrón y ajo; agregué lo que estaba cocido y luego mezclé con la salsa blanca y queso rallado.

ARMADO

 Que el relleno sea abundante y sin llegar a los bordes del costado

Lo enrollás bien, a mí no me gusta que se salga de los costados, pero es algo personal.
Colocás en asadera, cubrís con salsa blanca y espolvoreás con queso rallado.
Lo llevás a horno a 200*, hasta que gratine.
Y a disfrutar de algo rico!!!!
Inventá tu propio relleno de canelones y que te queden muy ricos, con cariño

viernes, 10 de mayo de 2019

Torta negra de choco y fruta


Cuando me siento a escribir, me pregunto, ¿quién lo leerá? Y hoy, espero que tengas la enorme dicha de tener a tu mamá viva. Y si te pasa como a mí, que ya no la tenés, deseo que te acompañen los mejores buenos recuerdos.
Te hablo de esto por dos razones, una es, porque justamente esta semana, hacen 12 años que no la tengo, y te soy sincera que me rodearon pensamientos de tristeza al extrañarla porque no importa la edad que uno tenga, siempre necesita a mamá.
Y la otra es, porque estamos a unos días de celebrar el día de la madre.
Cada día de esta semana, hubo muchas cosas para hacer, pese a eso, no dejé de extrañarla, ni dejé de agradecer a Dios el haberla tenido y disfrutado.
Cuando acudimos a Dios, contándole cómo nos sentimos, nuestro ánimo cambia. Él lo sabe todo, y quiere que le compartamos, porque nos hace bien a nosotros.
A veces no hay mamá, pero hay suegra o abuela o tal vez otras personas que aportaron a tu vida, te dejo una rica torta negra de choco y fruta, para que la invites a tomar un té o se la lleves cuando la visites y así tenga un feliz y “dulce” día de la madre.

TORTA NEGRA DE CHOCO Y FRUTA

ACEITAR
Molde redondo de 22 cm o cuadrado de 20x20
  
PONER Y MEZCLAR EN EL MOLDE CON TENEDOR O BATIDOR DE MANO:

½ taza de harina
¼ taza de maicena
1 y ½ cucharada de cacao cernido
½ taza de azúcar
½ cucharadita de bicarbonato
¼ cucharadita de sal
3 cucharadas de coco rallado
Pasas de uva
Nueces trozadas
3 cucharadas de manteca derretida o aceite
1 cucharadita de vainilla
1 cucharadita de vinagre blanco
¼ taza de jugo de naranja
¼ taza de agua

Mezclar hasta que desaparezcan los grumos, y quede una masa lisa.


Cubrir con gajos de manzanas o peras, hundiéndolos en la masa. Pueden ser también duraznos.

Llevar a horno a 175° unos 30 o 35 minutos. Pinchar con palito para comprobar si está cocida.
Queda con un fuerte color marrón. Podés espolvorear con azúcar impalpable.
Queda muy rica si la acompañas con una crema o un helado. 

Animate a hacerla y vas a ver qué rica te quedará, con cariño, 


jueves, 9 de mayo de 2019

Budín de gofio


¡Día de la madre! Es una fecha comercial en Uruguay, y vivimos la previa, bombardeados por la publicidad. Entrás a un shopping y es divertido ver a los niños acompañados de sus padres yendo y viniendo por los locales queriendo comprar ¡tantas cosas! A la mayoría de esos progenitores los ves con caras largas...no por lo que van a gastar sino porque se nota que detestan salir de compras, aunque hacen el sacrificio por honrar a las madres de sus hijos. Hace miles de años, quedaron registradas en la Biblia, palabras muy elogiosas acerca de una madre. Tengo ganas de transcribirlas para todas aquellas que leen el blog y son mamás. Y para aquellas que no pudieron tener hijos, también van estas palabras, porque seguramente influenciaron para bien, con su ejemplo, en los pequeños de la familia, de sus amigos, de una escuela, de una iglesia, ¡donde hayan entrado en contacto con alguno!
"Es mujer de carácter; mantiene su integridad y enfrenta confiada el futuro. Siempre habla con sabiduría, y enseña a sus hijos con amor. Siempre está pendiente de su casa y de que todo marche bien. Sus hijos la felicitan, su esposo la alaba y le dice: Mujeres buenas hay muchas, pero tú las superas a todas. La hermosura es engañosa, la belleza es una ilusión; ¡sólo merece alabanzas la mujer que obedece a Dios! ¡Que todo el mundo reconozca los frutos de su esfuerzo!"
A todas, feliz día de la madre!!!

BUDÍN DE GOFIO

INGREDIENTES

CERNIR
300 g de gofio
2 cucharadas de polvo de hornear
1 cucharadita de sal

BATIR CON BATIDORA ELÉCTRICA
3 huevos
150 g de azúcar (puede ser blanca o negra o mitad de cada una)
1 cucharadita de vainilla

AGREGAR Y BATIR
1 cucharada de anís en grano
125 g de manteca derretida
100 g de yogur griego o al natural

AGREGAR ALTERNANDO Y MEZCLAR BIEN CON BATIDOR DE ALAMBRE O UN TENEDOR
Los secos
1 taza de leche

Enmantecar un molde (de budín inglés o tortera) o tres moldes medianos.


Verter la mezcla y llevar al horno de 175* por unos 25 a 30 minutos, todo depende del horno y el tamaño del molde.
Antes de meter al horno, a uno le coloqué hundiendo en la masa, una manzana en gajos, a otro le tiré por encima pasas de uva y almendra molida; el otro lo dejé tal cual.
Pinchar con un palito de brocheta para verificar la cocción.
Como ves, quedan muy aireados. Por eso hay que batir muy bien los huevos y el azúcar.
La manzana, o puede ser una pera también, le aporta más humedad.
Queda una masa muy tierna y que se desmigaja fácilmente.
Te dura muy bien unos tres o cuatro días, cubierto con rolopac.
El gofio, típico de las Islas Canarias, es un producto conocido y usado más que nada en el interior del Uruguay.
Que te quede un rico desayuno o merienda y ni te cuento lo que es, untar una rodaja del budín con queso crema y mermelada de arándanos! Con cariño,