Escones de limón y semillas de amapola

Empezó agosto, un mes de altibajos climáticos en Uruguay, si bien es invierno aún, algunos días suele subir la temperatura, para luego volver a bajar abruptamente.

Lo que tenemos en común con más de 170 países, en la primera semana del 1 al 7 de agosto, es la celebración de la “Semana Mundial de la Lactancia Materna”.

Google nos dice que: “cuyo objetivo es fomentar la lactancia materna, o natural, y mejorar la salud de los bebés de todo el mundo. Esta Semana Mundial de la Lactancia fue proclamada oficialmente por la OMS y UNICEF en 1992. La OMS la recomienda como modo exclusivo de alimentación durante los 6 primeros meses de vida. A partir de entonces se recomienda seguir con la lactancia materna hasta los 2 años, como mínimo. Las 2 primeras horas de vida, son fundamentales ya que el recién nacido tiene un reflejo de succión muy fuerte, puede hacer entre 8 y 12 tomas al día, pudiendo ser más”.

En la Biblia, el apóstol Pedro, recomienda a los cristianos que, para ser mejores seguidores de Jesús, tienen que buscar todo lo que sea bueno y que ayude a su espíritu y dice: “Busquen todo lo que sea bueno y que ayude a su espíritu, así como los niños recién nacidos buscan ansiosos la leche de su madre. Si lo hacen así, serán mejores cristianos”

Un buen síntoma de salud espiritual, es buscar como un recién nacido, tal como lo dice en otras versiones: “la leche pura de la palabra”

Cuidamos nuestra salud física, ojalá cuidemos la salud espiritual, con el mismo o más interés aún.

ESCONES DE LIMÓN Y AMAPOLAS

BOL

1 taza de harina (agregar harina hasta que no se pegue a la mano, unas 2 cucharadas)

Pizca de sal

1 cucharadita de polvo de hornear

1 cucharada de semillas de amapolas o de sésamo negro o semillas al gusto

AGREGAR

1 huevo apenas batido

30 cc de aceite de girasol o de oliva muy suave

Ralladura y jugo de medio limón

Unir, no amasar.

Dejar reposar 5 minutos.

Extender con las manos hasta dejar la masa de 2 cm de alto y cortar a gusto. Si lo cortás a cuchillo (rectángulos, cuadrados o triángulos) será más rápido. Dependiendo del tamaño del huevo y del jugo de medio limón, tal vez necesites agregar un poco más de harina, pero andá agregando de a 1 cucharada.

Colocar sobre una bandeja

y pintar la superficie con un poco de leche y si querés, podés espolvorear azúcar, o sal gruesa, lo que gustes.

Horno a 200º hasta que tome un color doradito.

Ves que quedan gorditos, y muy tiernos por dentro

A mí me gustó más untarlos con queso crema

Pero vos podés usar lo que te guste más, dulce o salado. Y solos también están deliciosos.

Que te queden ricos, con cariño,