viernes, 31 de marzo de 2017

Tarta agridulce de cebolla morada, higos y queso

Cuando era una niña, en la casa de mis abuelos había una higuera, pero no me llamaba la atención eso que mi mamá le hacía a papá higos en almíbar.
Hace poco tiempo empezaron a gustarme y los incorporé en variadas preparaciones.
Sabiendo que el origen de la higuera es de la zona del Mediterráneo, Siria y el antiguo Egipto, entiendo mejor que mis abuelos, armenios, tuvieran una y a mis padres les gustaran tanto los higos.
Es interesante todo lo que se dice acerca de la higuera; por ejemplo en Google encontré que " si hay algo que llama la atención sobre la higuera es que es una planta llena de leyendas. La mayoría de ellas empezaron durante la Edad Media y han permanecido hasta nuestros días. Sin embargo, el poder esotérico de la higuera es muy anterior, ya en la Roma clásica era un árbol sagrado y con sus hojas se coronaba al dios Saturno. Los griegos dedicaban esta planta a Mercurio, y los espartanos, a Baco, en la India, la higuera se consagraba al dios Vishnu."
Una leyenda cuenta que: " durante la noche de San Juan, la noche más corta del año, la flor de la higuera florecía por única vez durando sólo unos instantes. Por eso, conseguirla era algo complicado y además era necesario subirse a la higuera y buscar entre las ramas más altas. Quién lo lograba finalmente obtenía como recompensa enriquecimiento y felicidad.
A esa hora además se escuchan gritos y gruñidos que provienen de dentro del árbol y que las serpientes y arañas, animales relacionados con el mal, rondan las ramas del árbol, así que es ¡sólo para aquel que no tenga miedo!" 
Muchas veces leí menciones a la higuera en la Biblia, y no son leyendas.
Una lectura en particular me da ánimo para confiar en Dios en los momentos en que parece que se derrumba mi seguridad pues tenerlo a él es tenerlo todo. El profeta Habacuc escribió lo que su corazón sentía: "Aunque no den higos las higueras, ni den uvas las viñas ni aceitunas los olivos; aunque no haya en nuestros campos nada que cosechar; aunque no tengamos vacas ni ovejas, siempre te alabaré con alegría porque tú eres mi salvador"
Pensaba que no iba a encontrar más higos buenos en el final de temporada, pero en el super había  tan lindos que compré algunos y preparé esta tarta que te sugiero probarla, es una delicia agridulce.
TARTA DE CEBOLLA  MORADA, HIGOS Y QUESO

Para una tarta de 4 porciones

MASA
Queda a tu elección (comprada hecha, de hojaldre, masa filo, de pizza, etc.) Usé masa filo.


CEBOLLA
200 g a 250 g de cebolla morada
25 g de manteca
2 cucharadas de aceite
sal
1 cucharada de azúcar (opcional)
Dejar que se cocine 30 minutos revolviendo de vez en cuando y cuidando que no se pegue al recipiente.
LIGUE
1 huevo
25 g de queso picante o con gusto fuerte desmenuzado (roquefort, feta, gruyere, etc.) Puede ser una mezcla de todos también.

HIGOS
6 unidades cortadas a la mitad y con un poquito del queso en el centro.
ARMADO
Masa
Cebollas
Ligue
Higos


Hornear a 180° unos 35 a 40 minutos, dependiendo del horno.
Se puede guardar unos 3 días en la heladera, y calentar antes de comer unos 10 minutos en horno.

 Mi sugerencia es que pueda servirse como bocadito en una reunión.
Te aseguro que si te gustan los agridulces, este formará parte de tus comidas, buen provecho

martes, 28 de marzo de 2017

Ñoquis de puré de zapallo instantáneo

¡Hoy es 29, día de ñoquis! Si sos rioplatense lo entendés.
¿Te estás preguntando qué significa eso? Bueno, te explico.
Sabés que son los ñoquis, ¿verdad? en italiano significa "bollito o pelotita".
Los ñoquis están identificados como un plato de pasta, a pesar de tener unos ingredientes muy diferentes y de poseer distinta forma de preparación.
Hay muchas maneras de hacerlos: con harina como ingrediente base, o con una mezcla de harina y papas, o de sémola, etc.
Se pueden cocinar cambiando el color y sabor agregando algunas de estas variantes cada vez: espinacas, morrones, zapallos, albahaca, ricota o roquefort, etc.
Si bien se les asocia con Italia, y allí se preparan muchas variedades según la región, el éxito de los ñoquis llegó incluso a países vecinos. En Alemania y Hungría existe un plato similar, los “spätzle”, que se acompañan con carnes asadas, o gratinado y servido en sopas. Los húngaros repitieron la receta, cambiando el nombre a “galuska”, que se acompaña con el famoso “goulash”, un guiso de carne.
En Argentina y Uruguay, la presencia de familias italianas hizo que se adquiriera la costumbre de comer pasta los domingos y el ñoqui al ser un plato de bajo costo y rápida elaboración (aunque se piense lo contrario) se hizo popular en la mesa de los domingos.
Es una comida que se prepara con la colaboración de varios miembros de la familia, en la cual hasta los niños pueden cooperar.
En realidad se pueden comer cualquier día del mes, pero hay una tradición que en esta parte del mundo dice que deben comerse los 29.
Y allí se establece como un ritual en el que en supermercados y fábricas de pastas se elaboran en mayor cantidad, restaurantes y hogares preparan platos abundantes de ñoquis caseros y se organizan juntadas familiares o de amigos para comerlos.
En torno al por qué hay que comerlos el 29, en Google hay varias historias que podés buscar y leer.
Aunque el común denominador está asociado al hecho de que es uno de los últimos días del mes, cuando el dinero escasea o se acabó y hay que esperar unos días para cobrar; la única opción es comer algo barato, contundente y hecho en casa como...¡los ñoquis!
¿Cómo surge la costumbre de poner una moneda o un billete de poco valor debajo de los platos? Se cuenta que data de principios del 1900, con la inmigración italiana.
La colectividad italiana era muy unida y entonces los que tenían buenos trabajos y contaban con mejores ingresos, invitaban a sus familiares o conocidos que no eran tan afortunados,  a comer ñoquis. Además, le ponían una monedita debajo del plato del invitado para que pudiera llegar a fin de mes.
Podríamos decir que se mantiene una buena costumbre, pero en realidad es una especie de superstición...el 29 como una cábala y la moneda para atraer suerte y dinero, olvidando la solidaridad y la buena administración.

Más allá de las historias, lo importante es aprovechar la fecha para comer unos ricos y suculentos ñoquis y pasar un buen momento en torno a la mesa con familia o amigos, agradeciendo a Dios por ellos.
Sin más, te paso una receta que a mí me sorprendió por lo fácil y rica que resultó.

ÑOQUIS DE PURÉ DE ZAPALLO INSTANTÁNEO

BOL
100 g de puré de zapallo instantáneo en sobre
Hacer un puré con la mitad del líquido que indica el envase.
AGREGAR
1 taza y media de harina blanca
1 cucharadita de sal
1 cucharada de aceite.
(Ir agregando la harina de a poco y si es necesario, agregar más pero no excederse)

Unir, pero no amasar porque si no, los ñoquis quedarían muy duros.
Que la masa descanse un poco.
Tomar porciones y formar rollos de unos 2 cm de diámetro.
Cortar en trozos, espolvorearlos con harina.
Dar forma con el tenedor o una ñoquera e ir poniéndolos sobre la mesada cubierta de harina para que no se peguen.
Cuando el agua hierve, poner sal y colocar los ñoquis.
Estarán prontos al subir a la superficie. Colar y servirlos con la salsa que gusta a la familia.
Que te queden re-deliciosos y buen provecho



sábado, 25 de marzo de 2017

Tarta de morrones

A veces contamos algo que vamos a hacer, o un diagnóstico médico y la gente empieza a dar su parecer sin que hayamos pedido una opinión, supongo que te pasó porque es algo muy corriente. Podés fastidiarte o podés aprender como expresa el dicho popular "el que escucha a la larga algo aprende."
Saber escuchar para tomar buenas decisiones es una de las claves del éxito. No digo que debemos hacer lo que los otros nos digan, eso no, sino que una vez conocidas otras opiniones tenemos más recursos para actuar mejor.
Un proverbio de la Biblia, del sabio Salomón dice: "el sabio se deja aconsejar" y también: "el sabio escucha el consejo."
Tal vez estás por tomar una decisión importante en tu vida y ojalá este pensamiento te ayude para que busques el consejo de personas que con sus opiniones te ayuden a actuar sabiamente.
Y ya que estamos hablando de consejos y sabiduría, te dejo cinco para que juntos esta semana podamos practicarlos...
1. Toma agua, mucha
2. Toma la iniciativa
3. Toma aire antes de responder
4. Toma la mano de los que sufren
5. Toma tiempo para hablar con Dios
En el último post subí una receta con morrones y hoy hay otra. Me gustan, es temporada y están a buen precio.
TARTA DE MORRONES

MASA
La que tengas y le guste a la familia o te sea práctica de usar.
En esta oportunidad usé masa filo.
RELLENO
REHOGAR EN SARTÉN
3 cucharadas de aceite
1 cebolla mediana picada (3/4 taza)
2 morrones grandes del color que quieras o una mezcla de colores (400 g)
1 cucharada de salsa de soja (opcional)
1 cucharadita escasa de sal
1 pizca de pimienta
Cocinar a fuego lento hasta que los morrones estén tiernos.
BOL
2 huevos batidos
1 taza de queso rallado que sea gustoso (parmesano)
3/4 taza de leche
Agregar los líquidos a los morrones y revolver durante un minuto hasta que la mezcla coagule un poco.
Verter sobre el molde ya cubierto con la masa.
La masa filo la trabajás así: ponés varias láminas de masa untadas con manteca o aceite una sobre otra en una asadera previamente pincelada con aceite. Una vez que hayas puesto unas 6 capas, extendés el relleno de forma pareja.
Hornear a 175° hasta que notes la masa cocida y el relleno esté firme. Y pronta para degustar.
Deseo que la hagas y tengas éxito, con cariño




viernes, 24 de marzo de 2017

Morrones rellenos de carne al micro

¿Habrá algo más tierno y comprador que un niño? Para mí no lo hay.
Son personas maravillosas, y la verdad que...¡a veces un tanto interesadas! Estos adorables personajes quieren engatusarte, ¡cosa que consiguen muy fácilmente! con una sonrisa especial, un abrazo, para conseguir algún beneficio como por ejemplo ¡¡un caramelo!!
Cuántas veces actuamos con Dios como niños. Lo buscamos, nos acercamos, tratamos de complacerlo, o de impresionarlo con nuestras palabras o acciones para obtener algo que queremos. Y una vez que obtuvimos "eso" que buscábamos, Dios ya no es el centro de nuestra atención.
Y es cuando las palabras que hoy leí, adquieren un significado mejor comprendido: "Nunca la bendición debe volverse más importante que el Dios que te da la bendición."
Sería buenísimo tener esto en mente al comenzar cada mañana, "lo más importante que tengo es a Dios", lo demás son extras...

Te cuento que en Uruguay hay algunas frutas y verduras de temporada que aparte de ricos están más en precio como las peras, las mandarinas, el zapallo, los morrones. Y hoy quiero compartirte una receta que me gusta mucho y se hace rapidísimo en el microondas.
¡Te aseguro que si la probás hacer, se transformará en una de tus favoritas!
MORRONES RELLENOS DE CARNE AL MICRO

CORTAR AL MEDIO


3 morrones rojos
Y quitar la parte del tallo y las semillas. Reservar.
RELLENO
En mi caso usé avena en lugar del arroz
400 g de carne picada cruda
1/2 taza de arroz parboiled cocido o en su lugar la misma medida de avena o de pan rallado
1/2 cebolla picada bien chica
1 diente chico de ajo picadito
perejil picado
sal
pimienta
comino
salsa blanca (la mitad de la receta que figura más abajo)
SALSA BLANCA
1/4 taza de manteca
1/4 taza de harina
1 taza y 3/4 de leche
1 cucharadita de sal
nuez moscada
ARMADO
Disponer cada mitad de morrón con relleno en un recipiente apto para microondas, previamente untado con aceite o manteca o spray vegetal.
Cubrir cada morrón con salsa blanca.
Cocinar al 100% durante 24 minutos aproximadamente (4 por cada unidad)

Si se desea, una vez cocidos, cubrir con una rebanada de queso cremoso cada unidad y cocinar 2 minutos más.
Los servís acompañando un puré o una sopa crema y puede ser también con una fresca ensalada o así solos
Te animo a hacerlos y que los disfrutes con buen provecho,

martes, 21 de marzo de 2017

Tartitas dulces de higo y queso feta

¿A qué cosas asociás el otoño? Para mí tiene un encanto especial por la paleta de colores que luce la naturaleza...colores cálidos, vibrantes, y también por el tranquilo sol que alumbra suavemente y se oculta más temprano.
Hay metáforas que lo hacen representar a la edad media de la vida, puede ser sí. La vida ya atravesó muchas experiencias y situaciones que la ayudaron a madurar y dar sus mejores colores en tranquilidad.
Mirá estas frases que buenas están: "Del otoño aprendí que aunque las hojas caigan, el árbol sigue en pie y nuevas hojas vuelven a nacer con más fuerza", "Cambia tus hojas pero nunca tus raíces, cambia tus opiniones pero nunca cambies tus principios".
Estos dichos de la sabiduría popular, o de poetas o  pensadores, es muy acertada.
El otoño es época de las cosechas y un Proverbio de la Biblia menciona lo siguiente "Quien no trabaja en otoño se muere de hambre en invierno." Está hablando de una virtud valorada y es la diligencia, el esmero, solicitud, la dedicación que tiene como contrapartida la pereza, la negligencia, el descuido.
Hay una época para producir y en la adultez todavía se pueden emprender actividades, proyectos, y de esa manera cuando llegue el invierno de la vida aún se disfrute de saciedad.
Y hoy, 21 de marzo, da inicio el otoño en el hemisferio sur. ¿Qué mejor que darle una bienvenida con un postre con higos, la fruta que da el inicio y la despedida al verano? Hay que aprovechar los pocos que van quedando en los supermercados y estoy segura que te encantará este bocado dulce.
TARTITAS DULCES DE HIGO Y QUESO FETA CON MASA FILO

Para 12 tartitas
MEZCLAR EN UN BOL
12 cucharadas de queso feta pisado con tenedor
2 huevos
4 cucharadas de azúcar
2 cucharadas de harina

ARMADO
Cubrir moldes de muffins con capas de masa filo pintadas con manteca derretida o aceite.
Poner una cucharada del relleno de queso, medio higo
y hornear a 180° hasta que se note cocida la base y tenga un lindo color tostado.
Al sacar del horno se puede poner sobre el higo un poco de miel y luego espolvorear azúcar impalpable.

 Este es un bocadito crujiente por la masa, blando por el relleno y jugoso por el higo...¡un manjar!
Te animo a probarlo, porque si no tenés masa filo, podés usar cualquier base de tarta y te quedará rico también. Buen provecho!!

sábado, 18 de marzo de 2017

Torta de chocolate y peras

¿Sos de escuchar o de hablar? Tal vez sos de saber cuándo hablar y cuándo escuchar, y eso ¡no es de todos!
Probablemente asociamos que se escucha sólo a las personas, y hoy leí algo muy lindo que nos invita a escuchar tantas otras cosas. Mirá lo que dice:
"Siéntate en silencio y observa cuánto hay allí para ser escuchado.
Escucha a la gente, lo que realmente están diciendo.
Escucha hasta la última nota de cada canción.
Escucha tu voz interna, esa que sólo escuchas cuando la confusión de cada día disminuye.
Escucha el susurro de las hojas, el llamado de las ranas, el crujido de la madera ardiendo en tu chimenea.
Escucha con tu corazón y siempre escucha aquello que nunca es hablado."

Para lograr esto, el autor menciona tres palabras: Siéntate, Silencio, Observa.
¿Sabés que también podés escuchar la voz de Dios si estás en quietud (siéntate), si dejás por un momento el celular, la TV (silencio) y leés la Biblia (observa)?
¡Es lo más beneficioso que podés escuchar cada día! Palabras sabias, alentadoras, cariñosas, verdaderas, consoladoras, sinceras....
Y ojalá que esta semana que comienza puedas escuchar cuánto hay allí para ser escuchado.

Y también te propongo hacer una torta que es una verdadera delicia. Me encantan el chocolate y las peras, así que esta combinación no podía ser mejor.
Acá va la receta.
TORTA DE CHOCOLATE Y PERAS

INGREDIENTES 


EN BOL UNIR (puede ser con batidora eléctrica, o manual o un tenedor)
100 g de manteca (si se quiere usar aceite son 80 cc)
1 taza de azúcar
AGREGAR Y BATIR
2 huevos
1 cucharadita de vainilla
INCORPORAR ALTERNANDO SÓLIDOS Y LÍQUIDOS
2 tazas de harina
1/2 taza de cacao en polvo
3 cucharaditas de polvo de hornear
1/3 taza de leche (si quedara demasiado consistente agregar un poquito más)
La masa debe quedar de una consistencia liviana, similar a torta de manteca.
Para facilitar quitarla del molde, cubrir el mismo con papel manteca y echar ahí la masa.
Pelar y cortar en gajos 4 ó 5 peras y disponer incrustándolos sobre la masa y armando el dibujo que gustes.

Hornear a 175° unos 25 a 30 minutos y pinchar con palito de brocheta para ver si cocinó bien. El olor y despegarse del molde es una buena pista, pero igual pinchar.
Quitar del molde con cuidado y espolvorear si se quiere con azúcar impalpable.
Se puede acompañar con un helado de crema o así sola es una delicia

 Probala que te van a aplaudir y pedir que la hagas muchas más veces. Te deseo éxito,