miércoles, 20 de septiembre de 2017

Medialunitas para el té

Un tropezón no es caída dice el refrán, aunque a veces un tropezón te hace caer!! Decímelo a mí, que ayer tropecé con una baldosa en mal estado y ¡al suelo! ¿Qué hice? Reírme y reírme... ¿qué es lo que provoca la risa y no el llanto? ¿El ridículo, la vergüenza? Porque la verdad que no tiene nada de gracioso cuando le pasa a uno o a los demás.
Investigué a ver por qué los humanos reaccionamos así y Google informa que una de las razones es que una caída tiene que ver con algo inesperado o improbable. Y que si caemos nosotros y conseguimos reírnos, nos sentiremos bastante bien luego. La Biblia dice que "no hay mejor medicina que tener pensamientos alegres"
Si ante cada dificultad de la vida reaccionáramos así, le restaríamos importancia y sería una manera de sobreponernos más rápido.

¿Cocinar te genera alegría?, si es así, te dejo la receta de unos bizcochitos que los hacíamos muy seguido en casa y en mi recetario le agregué para no confundir la receta con alguna otra "mis preferidas". Vas a ver que te encantará hacerlas por lo fáciles, rápidas y ricas.

MEDIALUNITAS DULCES DE MANTECA PARA EL TÉ

BATIR LIGERAMENTE Y RESERVAR
1 huevo
1/2 taza de leche

DERRETIR Y RESERVAR
40 g de manteca
BOL
2 tazas y media de harina
3 cucharaditas de polvo de hornear
3/4 cucharadita de sal
4 cucharadas de azúcar
60 g de manteca fría en cubitos

Deshacer con tenedor la manteca con los sólidos hasta integrar.
Agregar la leche y el huevo.
Unir hasta que quede una masa suave.
Se puede dejar reposar unos 15 minutos.
Estirarla bien fina con palote, untar con la mitad de la manteca derretida, espolvorear con harina desde un colador para que se distribuya parejo y doblar a la mitad.
Estirar otra vez, untar con la otra mitad de manteca, espolvorear harina
y volver a doblar, haciendo dos bollos.
Estirar cada uno y cortar triángulos
Cortás la masa en 4 y luego cada porción en 4   
Obtenés así, 16 triángulos por bollo estirado
Vas armando las medialunas, 32 en total con esta receta.
Si querés, podés rellenarlas como a veces lo hago con dulce de membrillo.
Ponerlas sobre asadera cubierta con papel de horno o silicona o en su defecto que esté apenas enmantecada. Yo pongo 16 por asadera.
Hornear a 175° o 180° y estar vigilando la cocción; cuando tomen color dorado y abajo estén prontas retirarlas y colocarlas sobre rejilla.
Cubrirlas con un azucarado que esté algo espesito, yo lo hice con 1/2 taza de azúcar impalpable y una cuchara al ras de agua hirviendo. Si te queda muy líquido, más azúcar impalpable y si es lo contrario más agua. No uses pincel, ni lo viertas, sino que pintalas con el dedo.
Es mejor comerlas en el día. Y ¡¡cuánto me gustan!!
Hacélas y si me mandás la foto, te la publico, con cariño, 



No hay comentarios:

Publicar un comentario